Para ser un buen directivo necesitas un conjunto de habilidades para las cuales debes estar preparado. Las puedes obtener a través de la experiencia o la educación. La clave es adquirir las habilidades, hábitos, y conocimientos que te ayudarán a realizar actividades directivas de manera más efectiva.
En este artículo te damos 10 consejos para alcanzar un puesto directivo.
Un directivo ideal debe tener el talento del líder. Un líder lleva a que sus colaboradores mejoren para lograr los objetivos de la organización. Si se ejerce un mal liderazgo se traduce en desmotivación, molestias y desorden, lo cual afecta resultados y puede afectar el funcionamiento general de la empresa.
Para ser un buen líder necesitas desarrollar una combinación de relaciones públicas, creatividad, empatía, habilidades para motivar y dirigir equipos, transmitiendo confianza, compromiso, respeto y apoyo a tus colaboradores.
Como directivo, debes delegar tareas y conducir su realización de acuerdo con lo planeado. Esto implica reconocer el talento de tus colaboradores y facilitar las herramientas, experiencia y conocimientos que se requieran para conseguir los objetivos.
Piensa que un buen directivo está calificado para organizar la carga de trabajo y distribuirla de acuerdo con las necesidades de la compañía, pero como buen líder, también debe participar activamente impulsando a sus colaboradores a lograr los mejores resultados.
Un buen director está preocupado por estar informado, actualizado y adquirir los conocimientos necesarios para hacer el mejor trabajo. Si ya ocupas un cargo directivo o estás en el camino hacia ello, es imprescindible potenciar tu formación. En este proceso, estudiar un Máster MBA o una especialización en negocios, es la forma más directa e integral de aumentar tus oportunidades de alcanzar un cargo directivo.
Toma en cuenta que al estudiar alguna especialidad en negocios adquieres los conocimientos y herramientas más actuales, además de aumentar el panorama en tu campo profesional.
Para ser un buen directivo necesitas habilidades que van más allá de los conocimientos técnicos para el cargo. Se precisa una actitud proactiva para adquirirlas porque forman parte del día a día de un ejecutivo.
Como directivo necesitarás: saber negociar, tener una mentalidad estratégica y preparada para afrontar propositivamente los retos que se presentan, tener buenas habilidades sociales y de comunicación para hacer buen networking y hablar con claridad, incluyendo la capacidad de promover y fomentar un trabajo armónico y con buenos resultados.
También necesitas estar actualizado con el contexto nacional e internacional para tomar mejores decisiones de negocios, lo cual implica estar informado y participar en los diferentes círculos sociales especializados en tu ramo de negocio.
En correspondencia con el punto anterior, la capacidad de motivar y dirigir equipos es crucial. Un buen líder tiene seguidores, un jefe, empleados. Es decir, como directivo a cualquier nivel necesitas tener habilidades sociales blancas que son determinantes para que la organización funcione: debes aprender a detectar el talento para cada puesto de tu equipo, ser un buen mentor y conector para tus compañeros de trabajo, propiciar un clima laboral propositivo y comprensivo de la situación de cada uno de tus colaboradores, o como se conoce popularmente, desarrollar inteligencia emocional.
Por último, es importante estar preparado para el cambio, en un mundo con tantos altibajos, el futuro es de quienes tienen una visión disruptiva.
Un director debe entender el mercado, la competencia, la industria, las estrategias y tácticas que deben implementarse, así como el papel de la plantilla en el éxito de la organización.
Si estás a cargo de un departamento, debes reunir un conjunto de habilidades analíticas y organizativas que ayudarán en el desarrollo de tus empleados.
Una empresa suele tener varios cargos directivos. Cada posición requiere conocimientos y habilidades específicas. Para ello hay diferentes especializaciones en negocios que puedes evaluar de acuerdo con los objetivos y resultados esperados para el puesto que deseas.
Elige un máster, una especialización, talleres o cursos, de acuerdo con tu nivel de experiencia, área de interés (finanzas, administración, marketing, etc.).
Para decidir con inteligencia puedes revisar los rankings de escuelas de negocios, donde puedes comparar la mejor opción para ti.
El trabajo de un directivo es más efectivo y provechoso cuando se desarrollan redes de colaboración amplias y fuertes. A través del networking se consiguen nuevos aliados, socios y clientes y puedes expandir el impacto de tu empresa gracias a ello.
Para hacerlo puedes participar en congresos, talleres, asistir a conferencias y participar en la vida interna de la empresa no solo como jefe, sino también como un integrante más del equipo. Hacer networking te abre puertas y hace más rápido el camino para consolidarse en un puesto directivo.
Un cargo directivo no solo debe ser para conducir los destinos de un área o de toda la empresa, también debe estar listo para analizar y comprender el contexto actual y futuro a fin de tomar decisiones disruptivas para aumentar el éxito del negocio.
Para innovar, necesitas estar actualizado y alerta de las tendencias nacionales e internacionales para el tipo de emprendimiento y adoptar las mejores prácticas.
El principal activo de una empresa es su capital humano. Procura ser atrevido y dar el siguiente paso que otros no se atreven. Busca soluciones innovadoras, actualízate, no temas a proponer soluciones fuera de la caja.
Acelera tu carrera profesional estudiando un Máster o una especialización, con ello podrás trazar un camino más certero hacia el éxito. Conoce las maestrías de EGADE Business School y forma parte de la comunidad de líderes empresariales más importante de México.